Joker.

Entornabas los ojos y pensabas cómo sería,
las cosas que te diría, cómo te haría reír.
Imaginabas lo suaves que serían sus manos,
lo dulce que serían sus palabras.
Y le pusiste mi nombre.

Podías ver el brillo de sus ojos,
sentir su sonrisa taladrarte por dentro.
Querías despertarte junto a ella,
y le pusiste mi cara.

Compusiste el guión entero, esperando que ella
se lo saltara, para decir las cosas que imaginaste,
para hacer las cosas que nunca escribiste.
Y yo te decepcionaba cuando hablaba a destiempo
te decepcionaban mis acciones sin sentido.
Te decepcionaba que yo pudiera romper en dos tu careta,
la careta que me hacías llevar, día a día.
Te defraudaba que tuviera vida propia.

Te decepcionaba que no fueras mi creador,
sin pararte a pensar que podía ser mejor
que lo que soñabas que era yo.
Y así, la decepción nos colmó a los dos.

... sin pararte a pensar que lo que soñabas era yo.