viernes, 4 de enero de 2008

Mirabas siempre al sur

Puede que sirva de algo
que no me sirva de nada,
todo lo que me atraía de ti
me lo imaginaba,
sin verte puedo echar de menos
todo
lo que nunca has sido,
la realidad siempre defrauda.
Aunque a veces pienso
que si no te aguanto a ti
no aguantaré a nadie,
volviendo a empezar,
a recobrar la percepción de mí,
sin la luna de tus orejas.
Negro oscuro casi noche
y yo viendo las bombillas
que dan a luz invernaderos
de hojas muertas
y flores deshojadas.
No me destruirás
si vienes esta noche,
no me descubrirás pensado en ti.
Si quieres encerrarme
en la felicidad de nunca verte
sin el disfraz,
que ya casi no me engañas,
que tienes que esforzarte
para hacerme
desfallecer.
Ya no es como antes,
ahora no me tengo ni a mi mismo
para juntar las manos con los ojos
y respirar.
Que nunca vas a ser como te pinto.

1 comentario:

Holly Golightly dijo...

... mitad de primavera, un cuarto de cielo y un colchón...