lunes, 5 de mayo de 2008

Castillos en el aire.

¿A quién no le gustaría tener la receta para arreglar todos los pasteles del mundo?. ¿Un bizcocho que sólo sabe a harina, pesado?, hacer un agujero en el centro y soplar en él; ¿que tiene demasiada azúcar?, tres gestos con la mano, como quitándole una pelusa a alguien del hombro, y arreglado; ¿y si tiene demasiada poca? sonreírle guiñándole un ojo y como nuevo, por ejemplo.

¿A quién no le gustaría encontrar a alguien que supiera llegar a esos lugares a los que no sabes cómo has llegado?. Alguien siempre dispuesto a buscarte, que su camino sea el buscarte a ti, siempre. Que siempre te encuentre, que pueda vivir contigo en una telaraña o en las mazmorras de tus recuerdos. Alguien que te corte los sueños con bisturí, con precisión quirúrjica, que comparta la almohada y los hombros. Que te busque y siempre te encuentre.



[Ilustración: René Magritte.]

1 comentario:

Paul Varjak dijo...

Yo me pido dos, como con los petisuis. La verdad es que sí, quién no querría eso. Aunque lo complicado no sea encontrar a esa persona, sino reconocerla.

Por cierto, ¿viste mi mensaje? Tuve que entrar a una tienda a mirar la contraportada de un DVD para "acordarme".