jueves, 20 de noviembre de 2008

Noa.

L

Hay fechas que parece que duelen.
Días que amanecen tristes por lo que dice el calendario.
Hay días de velas rojas,
y días de coronas de flores.

Días de llamadas de teléfono
en la madrugada,
de llamadas durante el día.
Días de sonrisas,
días que son una mierda.

Y está hoy.
El día que naciste.
El día que será tu cumpleaños siempre,
aunque no pueda llamarte.

Aunque no te vaya a ver más.
Aunque ni siquiera pueda creérlo todavía.
Porque seguirás cumpliendo años
con todos los que te queremos.

Y pienso que lo único que quedaba
de aquel niño rubio de ojos azules
era la mirada caída,
la media sonrisa.

Y no es cierto que ya no quede nada.
Te sentimos entero.
Aunque no supiéramos verte,
aunque no supiéramos hacer que nos vieras.

¿Cómo no me dí cuenta?.
Tú no lo sabes,
pero estar a tu lado era una maravilla.
Eres especial.

Me gustaba estar a tu lado
aunque parecieras mayor en penas.
Porque hacías brillar,
tenías ese "algo".
Me hacías sentir que todo iba mejor,
simplemente porque estabas a mi lado.
(Debe ser de familia, chico).
Y luego estaban tus manos,
tan parecidas a las del abuelo,
tan bonitas,
las uñas tan mordidas.

Así eres tú. Con tu melancolía. Así eras tú.
Cuando callabas.
Cuando estabas como ausente.
Cuando comías roquefort.
Así eras tú,
hermoso por dentro
y roto,
sin remedio.

Puedo verte en aquel paseo
solo, agarrándote la chaqueta.
Tan flaco.
Con tu melancolía siempre a cuestas.

Y no consigo comprender
no consigo no culparme,
no consigo...
porque no sirve de nada.

Porque ya no estás.
Ya no estás para pedirte perdón,
para mirarte a los ojos.

Y sólo quería felicitarte,
no diré "felices veintidós",
veintidós incompletos.
Diré "felices los que te quedan",
los que cumplirás mientras estemos contigo.

Y te quiero, mi chico.
Vida.
Si supieras cómo nos has cambiado.
Si supieras que se nos escapan las lágrimas
y que nos damos más abrazos.
Que nos queremos más por dentro.
Que suspiramos,
que te encontramos por todos lados.
Que hasta Tara llora.

No puedo esvitar pensar
que si lo supieras,
volverías.

Que, otra vez, no lo harías.

Aunque sé que fue ese día,
como podía haber sido cualquiera.

Así que, mi chico,
aquí me despido,
hasta el próximo suspiro.
Siempre te he querido.
Y te quiero.

Muchísimas felicidades,
allí donde estés.


2 comentarios:

Paul Varjak dijo...

The (International) Noise Conspiracy
It's Not Not
Viernes 12.12.08
Sala Heineken

(por cierto Holly, iba a decir algo de tu pelo, pero he preferido callarme. Un besaco)

Anónimo dijo...

Debía ser por la época de la seta fan de los Beatles, ¿no?... hace como 11 años o así, a juzgar por mi prima pequeña. Pero mira, mientras pienses un comentario sobre mi pelo y no sobre otras cosas -como los ojos azules- es que la recesión todavía no ha llegado... :P (por lo menos a ti no te ha llegado)...